No era una cualquier era una puta con clase por cabeza no pedia, mas ni menos de lo que valia por cabeza nunca daba, mas ni menos de lo que cobrara. Pude lograr lo que nunca otra mujer pudo lograr, demostrarle de verdad que habia tanta pasion junta. Dentro de mi corazon ahi en su cama desparramado en media hora de infierno toque el cielo con las manos. Se notaba en el colchon, mas sudor que en cualquier otro, y con caricias intentaba sanar su corazon roto. Porque hace falta mucho mas que dinero
o propina de segunda para tapar en el alma ese agujero que de amargura se inunda. Yo sigo llamandolo, pero ya no se viene a dormir si no hay mal, que por bien no venga que bien te trajo hasta mi?
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